Administrador de una Comunidad de propietarios, según sus conocimientos, tiene como funciones principales las siguientes:
Debe velar por el buen régimen del inmueble, de las instalaciones del mismo y de los servicios que necesita.
Debe preparar y llevar a cabo la debida junta de vecinos y en ella incluir el plan de gastos previsibles y los medios necesarios para hacer frente a ellos.
Atender la conservación y el mantenimiento de la finca, las reparaciones necesarias y comunicándoselas a los propietarios y al presidente de la Comunidad de vecinos.
Efectuar los pagos y realizar los cobros procedentes.
Custodiar toda la documentación de la finca.
Otras atribuciones que se le haya encargado por medio de la Junta de Propietarios mediante mayoría.
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